jueves, 21 de octubre de 2010

Educación

Un poema sobre la educación. "Leer más"


Educar es lo mismo que poner un motor en una barca...
Hay que medir, pesar, equilibrar
y ponerlo todo en marcha.
Pero para eso, uno tiene que llevar en el alma
un poco de marino... un poco de pirata...
un poco de poeta...
y un kilo y medio de paciencia concentrada.
Pero es maravilloso soñar mientras uno trabaja,
que ese barco, ese niño, ese joven
irá muy lejos por el agua.
Soñar que ese navío
llevará nuestra carga de palabras, de conocimientos y sabiduría,
hacia puertos distantes, hacia islas lejanas.
Soñar que cuando un día esté durmiendo nuestra propia barca,
en barcos nuevos seguirá nuestra bandera enarbolada.
Gabriela Mistral

2 comentarios:

Salvador Pérez Alayón dijo...

Educar, querida Gizatar, es también saber a dónde vamos, porque sin rumbo nos perderíamos y sentiríamos frustrados.

Para alcanzar la felicidad necesitamos saber donde se encuentra, y eso conlleva educación, sabiduría, conocimientos...

Un fuerte abrazo en XTO.JESÚS.

Gizatar dijo...

Efectivamente Salvador.

Si no se sabe, no sabemos, quienes somos, de donde venimos y a donde vamos no podremos configurar una adecuada antropología y se nos cuela el relativismo.

Un profesor nos comentaba que los cristianos debemos tener muy claro esto porque ya tenemos las respuestas encaminadas y que todo lo demás, en educación, es punto y seguido.

Gracias por la sugerencia.

Un fraternal abrazo.

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